El futuro del GLP en Europa y España: ¿una alternativa real en la transición hacia una movilidad sostenible?
Descubre el auge del GLP (autogás) en Europa y España, sus ventajas medioambientales y económicas frente a la gasolina y el diésel, y su papel como opción de transición hacia una movilidad sostenible.
GLP en Europa: crecimiento sostenido y apuesta por la eficiencia
El Gas Licuado del Petróleo (GLP), conocido también como autogás, ha encontrado en Europa un terreno fértil para su expansión. Con más de 8,2 millones de turismos propulsados por GLP circulando en el continente, según datos de Liquid Gas Europe, se ha consolidado como la principal alternativa a los carburantes tradicionales en mercados como Italia, Polonia y Alemania.
La infraestructura también acompaña: más de 32.000 estaciones de servicio en Europa ofrecen GLP, lo que garantiza una autonomía real y una cobertura extensa. Este despliegue convierte al autogás en una opción viable para rutas interurbanas y para aquellos países que aún están en proceso de electrificación total.
Además, diversos gobiernos europeos han establecido incentivos fiscales, descuentos en peajes y ventajas para vehículos GLP en zonas urbanas, lo que refuerza su atractivo para el consumidor medio.
España acelera: ventas al alza y conversiones en aumento
Aunque tradicionalmente rezagada en la adopción de esta tecnología, España está experimentando un repunte notable. Solo en 2023 se matricularon más de 22.000 turismos GLP, un 75% más que en 2022. Si sumamos las conversiones de gasolina a GLP, que crecieron un 30% en 2024, el parque supera ya los 100.000 vehículos en circulación.
Ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia y Sevilla han visto aumentar significativamente las matriculaciones de vehículos GLP, impulsadas por la necesidad de alternativas viables ante las restricciones de tráfico por contaminación.
Por otro lado, talleres certificados para la transformación de vehículos a GLP han multiplicado su actividad, ofreciendo paquetes accesibles con garantías de hasta cinco años. La industria auxiliar está creciendo, lo que genera empleo cualificado en una cadena de valor que abarca desde el suministro hasta el mantenimiento.
Esta cifra sitúa al GLP como una alternativa real para conductores que buscan ahorrar y reducir emisiones sin renunciar a la movilidad en zonas urbanas con restricciones medioambientales.
Ventajas del GLP: ahorro, etiqueta ECO y menor impacto ambiental
Los beneficios del autogás son contundentes:
- Hasta un 30% menos en coste de carburante respecto a la gasolina.
- Etiqueta ambiental ECO de la DGT, que permite circular libremente por Zonas de Bajas Emisiones.
- Menores emisiones de CO2, NOx y partículas, lo que lo convierte en una opción más limpia que gasolina o diésel.
Estudios del Clúster Autogas muestran que el coste total de propiedad de un coche GLP es un 12% inferior al de un gasolina y un 18% al de un eléctrico, gracias a su menor precio de compra y gasto en combustible.
A estas ventajas se suma una mayor autonomía total, ya que muchos vehículos bifuel pueden recorrer hasta 1.200 kilómetros combinando gasolina y GLP, lo que los convierte en opciones especialmente interesantes para transportistas, taxistas y usuarios frecuentes de carretera.
Además, el mantenimiento del motor suele ser más económico, ya que el GLP genera menos residuos carbonosos, lo que prolonga la vida útil del motor y reduce las visitas al taller.
Competencia con el vehículo eléctrico: ¿complemento o rival?
Aunque el foco de las políticas europeas y del Plan MOVES en España está claramente puesto en los vehículos eléctricos e hidrógeno verde, el GLP ha encontrado un espacio como tecnología de transición. No emite cero emisiones, pero sus niveles de contaminantes son considerablemente más bajos y permite una adopción más asequible.
En regiones con menor infraestructura de carga eléctrica o con climas extremos donde las baterías pierden rendimiento, el GLP representa una solución práctica y fiable. Asimismo, para quienes no disponen de garaje o punto de carga propio, los vehículos GLP permiten mantener la autonomía y libertad de uso sin grandes inversiones iniciales.
La falta de ayudas públicas directas al GLP contrasta con el mantenimiento de ventajas fiscales y la alta disponibilidad de surtidores, lo que compensa en parte esta carencia. Algunas comunidades autónomas están comenzando a plantear incentivos específicos para esta tecnología, especialmente en flotas públicas y transporte urbano. El futuro del GLP en Europa y España
Hacia el bioGLP: la evolución verde del autogás
El futuro del GLP pasa por su versión renovable: el bioGLP, producido a partir de residuos y aceites vegetales. Esta variante puede reducir las emisiones de CO2 hasta en un 80% respecto al GLP tradicional, aprovechando la infraestructura actual sin necesidad de inversiones adicionales.
Diversas plantas en Europa ya están produciendo bioGLP de forma piloto, y se espera que para 2030 pueda representar hasta un 30% del suministro total de GLP en la UE. Este desarrollo ofrece una vía para cumplir con los objetivos de descarbonización sin necesidad de abandonar tecnologías existentes.
El bioGLP podría ser especialmente útil en sectores como la agricultura, el transporte pesado regional y servicios de emergencia, donde la electrificación total aún enfrenta barreras técnicas.
Esta evolución podría alinear al autogás con los objetivos climáticos europeos, consolidándolo como una solución viable y sostenible a medio plazo.
Vídeo sobre las verdad del GLP, sin censuras
Visitamos a Emilio Miñán, alma mater de Talleres ARG, referente nacional en transformación y desarrollo de sistemas GLP
Desde su sede en Albacete, Talleres ARG se ha convertido en un punto de referencia para la transformación de vehículos a GLP (Gas Licuado del Petróleo). Bajo la dirección de Emilio Miñán, apasionado de la automoción y experto en electrónica aplicada, el taller recibe coches de toda España: desde deportivos exclusivos hasta utilitarios, pasando por proyectos singulares como campers creados a partir de ambulancias y furgonetas.
En nuestra visita, Miñán nos habla sin filtros sobre las ventajas reales del GLP, sus desafíos técnicos y los numerosos mitos que aún rodean a esta tecnología. Su experiencia revela un panorama mucho más complejo y fascinante de lo que muchos imaginan.
El GLP, pese a estar instalado y regulado desde hace años, sigue siendo un gran desconocido en España, incluso ahora que algunas marcas lo están dejando de lado. Pero lejos de desaparecer, la industria del autogás se mantiene activa y en crecimiento, con un ecosistema de talleres, distribuidores y fabricantes que apuestan por su viabilidad presente y futura.
Con claridad, conocimiento y una visión crítica, Emilio Miñán —conocido ya por muchos como “el rey del GLP”— comparte su trabajo, su pasión y su visión sin censura sobre el presente y futuro de este combustible alternativo.
Reflexión final: el GLP, una opción realista en la transición ecológica
En un escenario donde la electrificación avanza pero no cubre todas las necesidades del parque automovilístico, el GLP se posiciona como una alternativa pragmática, económica y medioambientalmente responsable. Permite reducir emisiones de forma inmediata, aprovechar tecnología disponible y generar un puente realista hacia un futuro de cero emisiones.
Es esencial que las administraciones contemplen todas las opciones tecnológicas en su estrategia de movilidad. Apostar exclusivamente por una solución puede dejar fuera a millones de ciudadanos que no pueden asumir los altos costes de acceso a un coche eléctrico nuevo.
El GLP no es el destino final, pero puede ser el camino más sensato para muchos conductores hoy. Su papel como tecnología puente debe ser reconocido, fomentado y regulado con inteligencia para maximizar su impacto positivo en el medio ambiente y en la economía de los hogares españoles. Leer más
El futuro del GLP en Europa y España: ¿una alternativa real en la transición hacia una movilidad sostenible?
CONTÁCTENOS